El silencio puede ser culpable
Estas notas se redactaron para ser leídas en el comité previó a la elaboración de listas. Como quiera, que entonces, no hubo ocasión; estimamos que deben ser conocidas, y por esta razón las difundiremos.
Con posterioridad tuvo lugar la presentación de candidaturas municipales y autonómicas.
A la vista de los acontecimientos, nos reservamos de momento, nuestra opinión y la postura pertinente.
NOTAS AL COMITÉ:
El silencio, cuando no hay riesgo de inoportunidad política, es aquiescencia culpable. Consentimiento doloso en el que ni quiere ni puede incurrir Izquierda Socialista, y, menos en una actualidad inquietante como es la elaboración de las "listas". (Inquietud palpable en todos los ámbitos del Partido).
Una vez más recalcamos que Izquierda Socialista no es un grupo de presión, ni una plataforma de promoción personal, es única y exclusivamente una corriente de opinión. La única reconocida estatutariamente, y como tal reflexionamos, debatimos, proponemos y nos manifestamos.
Desde esta concepción estructural, no exigimos cuotas de representatividad, aunque nos consideramos con derecho a ello por nuestra militancia comprometida. Pero sí queremos alertar ante las nominaciones y designaciones de compañeras y compañeros como candidatas y candidatos.
La Comisión Ejecutiva Federal y el Comité Federal (21/01/06), han dictado una serie de principios a respetar en la elaboración de candidaturas. Se exigen a los y las integrantes:
- Representatividad y proyección social.
- Mérito y valoración de labor realizada.
- Estimación del potencial de actividad futura.
- Necesidad de funcionamiento y especificidad.
Todas estas notas de idoneidad, Izquierda Socialista supone, exige y requiere de todos y todas los y las componentes de nuestras candidaturas. Supuesto de capacidad y competencia que celebraremos o reprobaremos a lo largo de la legislatura.
Nuestro único interés: la gestión bien realizada y el respeto a los ciudadanos.
Pasado el 27 de mayo, pondremos a vuestra disposición un documento más explícito y una propuesta sobre la coyuntura, la dinámica y la estructura municipal.
¡Lo dicho, que el silencio puede ser culpable!
"A este respecto hemos leído: Hay un silencio peor que el de los silenciados, de los que no hablan porque no pueden o no saben hablar: es el silencio de los silenciosos, de los que callan pudiendo y debiendo hablar. Y, así, la voz que pudo ser remedio, por miedo no fue nada"
(F. Mayor Zaragoza).
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