Cambio de sillas en PSCL
El juego de las sillas parecía ayer la bancada socialista de las Cortes, en puesta de largo de cargos tras los cambios introducidos por el secretario del PSCL, Luis Tudanca. El sitio de Óscar López dejó de estar vacío, ocupándolo Ana Redondo, que se estrenó con dos nuevos compañeros de viceportavoces, Ángela Marqués y David Jurado, y votando a Ana Sánchez como vicepresidenta segunda de la Cámara. Todo ello, entre algún que otro silencio incómodo y tímidas miradas de reojo y ante los atentos ojos de su líder en Castilla y León, que desde el sitio para los invitados comprobó cómo todos tomaban y dejaban sus puestos.
El hasta ahora viceportavoz y villarrubista Julio López hacía el primer movimiento de sillas. Cambiaba de fila y cedía su sitió a Ángela Marques, junto a ella Jurado, que tomaba el de Redondo y ésta el de López. El palentino llegó tranquilo seguro y con los abrazos de algunos de sus compañeros. Más perdido entró Julián Simón de la Torre, acostumbrado a la Mesa de las Cortes, sin saber exáctamente dónde se tenía que sentar. La explicación, es fuera cual fuera sería perecedero, sólo duraría una votación, la de su sustituta en la vicepresidencia, Ana Sánchez, quien recibió el respaldo unánime de su formación con palmadita en la espalda incluida de su predecesor cuando regresaba de sentenciar en la urna su salida del cargo. Entonces el procurador tomaría el escaño de su sucesora.
Todos en sus puestos, y con el aplauso del Hemiciclo, Ana Sánchez fue la última en sentarse en este ajetreo de movimientos, tras fundirse en un abrazó con su compañera de filas, Teresa Gutiérrez, que desde lo alto de la Mesa de las Cortes tomó una foto para recordar el nuevo croquis de la bancada remodelada por Luis Tudanca, quien serio, en su primer pleno parlamentario, verificó todo desde las alturas y escuchó las itervenciones de los suyos y los saludos indirectos de los populares. Su máximo responsable, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, se los dio en persona en una reunión informal entre ambos, según explicaron a ABC fuentes socialistas.
Más allá del cambio de «cromos», el malestar de los principales «baluartes» de las filas «villarrubistas» es más que evidente. El más dagnificado, posiblemente, es el palentino Julio López, que protagonizó el pasado lunes un choque con Luis Tudanca tras conocer que se quedaba fuera de la dirección del Grupo. Sin sueldo de las Cortes -únicamente las dietas- López, que sí seguirá en la Ejecutiva como secretario de Política Económica, quiso trasladar cara a cara su enfado. Fue en la primera reunión del principal órgano del partido. Según pudo saber este periódico, el palentino pidió la palabra y preguntó a Tudanca del porqué de su salida de la dirección. Ante la falta de una respuesta concreta, López desveló ante los presentes que fue minutos antes de esa reunión -sobre las cinco menos diez- cuando supo a través de una llamada teléfonica que se convertía en un procurador «raso». Pero el también edil fue más allá al reseñar que Tudanca le había confesado que su decisión se basaba en que, supuestamente, los palentinos no habían respaldado a la Ejecutiva en la votación del sábado. También reseñó que el líder del PSCL se había comprometido días antes con la secretaria provincial del PSOE palentino, Miriam Andrés, en mantener a Julio el puesto de «liberado». Ahora volverá en unos días a su labor docente.
Mientras, Julián Simón de la Torre -que sí se mantiene en la dirección del grupo- consideró ayer que el nuevo secretario regional «ha seguido viejas costumbres y ha formado una ejecutiva intentando un equilibrio con los que le han ayudado», al tiempo que lamentó que «se ha equivocado con las personas que ha hablado y de la manera en que lo ha hecho». Por todo ello, consideró que «no es el mejor inicio» de la nueva etapa, aunque deseó que la situación se «tranquilice».
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