El PSOE se queda sin alcalde y con Óscar López en la picota

• Pierde toda su representación en el Ayuntamiento y debe reconstruir el diálogo con la federación leonesa, gran respaldo de Folgueral
• Varios dirigentes coinciden en que el episodio de Ponferrada deja tocados al secretario de Organización y a la responsable de Igualdad
• Griñán habló con Rubalcaba el viernes por la tarde para trasladarle que Andalucía no podía tolerar la moción de censura 
• La dirección federal alega que la salida del partido del alcalde y de los siete ediles "se ajusta a lo dicho" por el secretario general

El tsunami de Ponferrada ha dejado demasiados damnificados en la orilla. Y todos se apellidan PSOE. El escenario después de la catástrofe deja a un partido naufragando en su tercera crisis en apenas dos semanas, sin representación municipal en la localidad leonesa –la sexta de Castilla y León– y a un secretario federal de Organización, Óscar López, muy hundido. Un doloroso parte de daños para un asunto, en primera instancia, local.

La montaña rusa no se detuvo ayer domingo. El día despertaba con el ultimátum fresco de Alfredo Pérez Rubalcaba en Telecinco a Samuel Folgueral, el hombre que conquistó la alcaldía de Ponferrada el viernes gracias al voto imprescindible de Ismael Álvarez, condenado por acoso sexual a Nevenka Fernández en 2002. "O deja la alcaldía o deja el PSOE", decía el secretario general en El gran debate. Horas antes, había asegurado ante los periodistas que Folgueral acabaría dimitiendo, "tiempo al tiempo". 

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