Villabrágima pide estudiar 20 casos de cáncer que achaca a una antena ilegal

La acumulación de veinte casos de cáncer en los últimos «dos o tres años» en el entorno de una antena de telefonía ha suscitado la alarma entre los vecinos de la localidad vallisoletana de Villabrágima al establecer una presunta relación entre las emisiones electromagnéticas del equipo de telefonía y los procesos oncológicos. La estación base está situada en una propiedad privada al final de la calle Aureliano Carro, según informa una vecina, Mari Luz de Castro, que es además hija de uno de los fallecidos por cáncer, en este caso de pulmón.

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Los enfermos se concentran en un grupo de viviendas cercanas a dicho equipo base «instalado hace diez años de forma ilegal; ya que carece de licencias tanto ambiental como de actividad», según destaca esta vecina y la asociación vallisoletana de afectados por antenas de telecomunicaciones, Avaate. Destaca además esta organización que, «al aumentar la distancia con la antena, desaparece la alta concentración de enfermos de cáncer». Son 1.100 las personas empadronadas en este pueblo, según datos facilitados por el Ayuntamiento, y ya han reunido 700 firmas para exigir la «inmediata retirada» de las antenas de telefonía y un estudio epidemiológico que aclare las causas de esta acumulación que estiman como inusual, concentrada en espacio y en el tiempo, dado que todos los casos se han dado en los últimos años y tras varios ejercicios de emisión de dicho equipo base. Los casos se concentran en la citada calle donde se ha instalado, los propios dueños de la finca están afectados, así como en entre las calles Arzobispo Goldáraz y Fructuoso de Paz y Constitución, según fuentes de Avaate.

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